Descubre más acerca de nuestro trabajo, clientes y proyectos a continuación.
rebranding que es y cuando usarlo

Claves para lograr un rebranding exitoso


Luis Ebenezer
Compartir

El rediseño de una imagen corporativa o rebranding es, sin duda, una gran oportunidad para marcas y empresas de reinventarse, establecer un nuevo posicionamiento, incrementar la relevancia ante sus clientes y el mercado y, por supuesto, impactar de manera positiva en su rentabilidad. Pero, ¿sabes qué es el rebranding y cuándo utilizarlo? De eso hablaremos aquí.

Primero lo primero… ¿qué es rebranding?

Cuando hablamos de rebranding nos estamos refiriendo al rediseño de identidad o imagen corporativa, así como al cambio de marca. Se trata de una estrategia tras la cual crearemos un nuevo término, diseño, nombre, símbolo o combinación de los mismos para una marca ya establecida. El objetivo es dar origen a una nueva identidad para que viva en la mente de las audiencias clave: internas, inversionistas, influencers, líderes de opinión, consumidores, prensa, entre otros.

Pero ojo: más allá de los aspectos gráficos como logos, colores y mascota, cuando una marca se plantea un proceso tan complejo como éste, ya sea por necesidades comerciales o corporativas, es importante tener en cuenta las implicaciones de negocio y económicas que deben asumirse previamente y durante la implementación. 

¿Qué detona un rebranding y cuándo utilizarlo?

Antes de destinar recursos al cambio de una marca, las empresas deben cuestionarse si los cambios merecen la pena, qué beneficios obtendrán y cuál será la naturaleza de dicha transformación (actualización o un cambio completo, por mencionar dos ejemplos).

A continuación enlistamos seis de los principales detonadores de rebranding:

    1. Redefinición de la misión, visión y propósito. 
    2. Falta de actualización de la imagen corporativa por un periodo largo de tiempo.
    3. Falta de relevancia o vinculación con clientes. 
    4. Nuevo posicionamiento en el mercado. 
    5. Cambio en el liderazgo dentro de la empresa o corporación.
    6. Mala reputación.

 

Inside-out thinking 

El primer paso es hacer una profunda inmersión para comprender todas aquellas conexiones psico-emocionales que deseamos modificar tras el rebranding.

Una marca no es lo que hace una empresa o su aspecto, sino lo que la gente cree que hace y lo que siente por ella, por lo tanto nuestra investigación deberá tomar en cuenta tres aspectos principales: 

propositos

Team in action!

Una vez que la investigación y el análisis nos han ayudado a identificar los cambios necesarios, el siguiente punto es entender la inversión respecto a los recursos operativos internos y externos para poner en marcha las mejoras, y posteriormente crear un equipo de marca multifuncional, que incluya desde recursos humanos y ventas, hasta otros expertos dentro de la organización. Igualmente, hay que considerar a todos los “héroes” internos que sean ampliamente respetados y sepan cómo funcionan realmente la cultura y la política de la empresa. 

No te espantes: los diferentes egos e intereses probablemente chocaran y esto puede hacer que el desarrollo de la marca y su rebranding sea más complejo. Sin embargo, es mejor descubrir y tomar en cuenta estos puntos de vista divergentes durante el proceso de creación, que esperar a que surjan después de que la marca haya sido desarrollada y comunicada.

Creating meaningful connections

Como mencionamos anteriormente, el rediseño de una identidad corporativa es un proceso que requerirá de paciencia y, sobre todo, de compromiso; pero también es una oportunidad muy valiosa para reiniciar, restablecer conexiones y generar relaciones más profundas con los clientes.

Por lo anterior, es crucial para el proyecto construir un concepto gráfico y visual con un verdadero y profundo significado que otorgue valor y comunique de una manera eficiente el ADN, la estrategia de negocio y la visión a futuro de marca, sin ningún titubeo. 

Crear prototipos, evaluar todas y cada una de sus posibilidades de implementación, y editar constantemente serán pasos clave para obtener un resultado exitoso. 

Recuerda: la frustración es parte del método creativo, no hay que temerle.   

Un acto radical

Finalmente, se debe entender que cambiar un logotipo o nombre no será suficiente si verdaderamente se quiere una transformación de marca: el enfoque debe ir más allá de la percepción de los clientes, nuestros productos y servicios y la diferenciación frente a competidores. 

Para ofrecer una metamorfosis completa, debemos llevar a cabo un proceso de conversión que va desde la operación, el equipo de liderazgo, la producción, la distribución, los recursos humanos y el servicio a cliente, etc. 

Posteriormente, se establecerá una estrategia de comunicación interna y externa que abarque distintos canales de comunicación y nos permita presentar y comunicar nuestra nueva imagen en el mercado. 

A continuación te compartimos una síntesis del proceso de rebranding:   

    1. Identificar los motivadores del cambio.
    2. Analizar las ventajas y riesgos que puede producir el rebranding. 
    3. Crear un plan de proyecto y un presupuesto para la inversión de recursos necesarios en la implementación. 
    4. Creación del brand team
    5. Planeación estratégica y conceptualización gráfica y creativa. 
    6. Alineación de procesos dentro la organización.
    7. Campaña interna y externa de relanzamiento.
    8. Medición constante del impacto dentro del mercado.    

 

Ya sea que quieras identificar si es necesario o no pasar por un proceso de rebranding, que tengas uno en puerta y/o requieras crear una estrategia de comunicación estratégica para dar a conocer tu nueva imagen, cuentas con nosotros. Podemos conversar cuando quieras.

New Call-to-action