¿Quién de ustedes no ha enfrentado el dilema de decidir cómo distribuir su presupuesto de mercadotecnia? Elegir entre relaciones públicas o publicidad: ¿qué es mejor y cuál es más efectiva? ¿Debemos escoger entre una u otra? ¿O se complementan?, ¿Cuándo utilizo una y cuándo utilizo la otra?
Aunque entiendas de relaciones públicas y publicidad, es muy común que, como gerente de mercadotecnia, desconozcas el potencial que pueden llegar a tener estas herramientas de marketing, tanto de forma aislada como combinada. Los resultados que alcanzan, si son ejecutadas bajo una estrategia de comunicación bien definida, pero sobre todo a través de un equipo especializado que logre integrar ambas disciplinas y las haga coexistir por un objetivo en común, pueden ser mayores a lo esperado.
Primero hay que tener en claro que aunque ambas comunican, no necesariamente persiguen los mismos objetivos. Por un lado, la publicidad concede una recordación de marca y conocimiento de producto casi inmediato; por el otro, a través de las relaciones públicas (RP), construyes una reputación de marca, o bien, cambias la percepción del consumidor.
Mientras que la publicidad genera casi de forma directa las ventas de un producto o servicio al potenciar el conocimiento de marca a través de la compra de espacios publicitarios, las relaciones públicas impulsarán retornos de inversión a largo plazo al construir la reputación de marca y su posicionamiento con publicaciones gratuitas en medios de comunicación (publicity) .
Dicho lo anterior, podemos considerar que ambas herramientas de marketing pueden complementarse y crear sinergia para potenciar una estrategia de comunicación. Sin embargo, es importante conocer los límites y alcances de ambas disciplinas para construir una estrategia más efectiva. Aquí el reto está en elegir y contar con equipos expertos que puedan estructurar un plan de comunicación en el que los recursos se aprovechen al máximo.